*Abrazos no balazos, es una rendición ante la delincuencia y un mensaje de impunidad.
Rosalba Amezcua Agencia Libertad ANI (México 04 de julio).- Aunque hasta ahora no hay noticias de empresas que quieran salir de México derivado de la fuerte inseguridad que se vive en el país, hay inversiones detenidas por este flagelo que afecta al sector productivo y a todos, incluida la Iglesia Católica, aseguró el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Medina Moras Icaza quien le demandó al gobierno federal un cambio de estrategia.
En tanto, el secretario general de la Coparmex, Gerardo Trejo, dijo que el gobierno federal no está “para dar ni abrazos ni balazos” que es claudicar y enviar un mensaje de impunidad, sino para garantizar la seguridad y esa política ha fracasado pues en cuatro años del presente gobierno, se han rebasado los asesinatos en comparación con el sexenio de Felipe Calderón.
En conferencia de prensa para dar a conocer los resultados de #DataCoparmex 2.0 donde los indicadores de inseguridad y cobro de piso y extorsión van en aumento en todo el país, el presidente del sindicato patronal, Medina Mora, respaldó las declaraciones de la Iglesia Católica y el daño que a las inversiones está causando esta ola de violencia.
“Desde luego, la inseguridad afecta a las inversiones en el sentido de que es un costo adicional que las empresas evalúan para ver si sus proyectos de inversión son viables, este costo ha aumentado en la medida en que ha incrementado la inseguridad sin embargo, no tenemos noticias de ninguna empresa que haya decidido retirarse del país por cuestiones de la creciente inseguridad, si de empresas que han decidido detener sus inversiones hasta no tener un entorno de mayor seguridad pero si detenido hasta no tener un entorno de mayor seguridad.
El líder empresarial, consideró que la postura de la iglesia católica tiene sentido que se exprese porque no solo se concreta al asesinato de los sacerdotes jesuitas sino a las denuncias del obispo de Zacatecas que ha sido detenido en retener del crimen organizado, el Cardenal de Guadalajara que menciona que en un par de ocasiones también lo han detenido en esos retenes y que hay cobro de piso en parroquias, además de un prelado golpeado en Morelia, etc.
“Hay una agresión hacia miembros de la iglesia católica que simplemente es el reflejo de lo que sucede en el país, debemos de tomar estos casos como casos de lo que pasa en todo el país y por eso es importante mencionarlo porque esto nos tiene que hacer caer en cuenta ser conscientes de esta creciente inseguridad y cómo afecta al sector productivo”, señaló.
Agregó que el creciente número de asesinatos y de inseguridad “si es momento de revisar esta estrategia de seguridad” y ver qué ajustes se requieren para lograr ese México en paz que todos queremos.
Por su parte, Gerardo Trejo, dijo que la estrategia del gobierno federal para combatir la inseguridad denominada “abrazos no balazos, ha fracaso por lo que urge dar un giro de timón”.
“En lo que va de la presente administración, en tres años y medio se han registrado más de 121 mil 600 asesinatos, lo que incluye homicidios dolosos y feminicidios de acuerdo a cifras oficiales, rebasando el total que hubo en todo el sexenio del presidente Felipe Calderón. Durante el pasado mes de mayo se registraron 2 mil 910 asesinatos en el país colocándolo como el mes más violento de lo que va del 2022. El gobierno no está para dar abrazos ni balazos, existe para garantizar la seguridad física, patrimonial y jurídica de los ciudadanos, utilizando el uso proporcional de la fuerza conforme se requiera”, recalcó.
Por ello, el secretario de la Coparmex, añadió que nadie quiere declaraciones de guerras, pero tampoco queremos claudicaciones o rendiciones porque es importante que “quien la haga la pague y no debe haber impunidad.
“Los incentivos deben ser correctos, al que actúe dentro de la ley le debe ir bien y quien comete un delito debe recibir un castigo. Basta ya de pretextos, el gobierno debe modificar su estrategia empezando por cambiar el abrazo no balazos que está mandando un mensaje equivocado de impunidad al no haber castigo para los delincuentes. No hay tiempo que perder, se debe reconocer lo que no está funcionando y modificar la estrategia hasta obtener buenos resultados. Sin seguridad no hay bienestar ni desarrollo posible”, concluyó.
