*Insiste en que en su administración no hay límite para invertir en seguridad y derechos humanos
Por: Arturo García Caudillo Agencia Libertad ANI (México, 26 de enero de 2023).- El presidente Andrés Manuel López Obrador, no quita el dedo del renglón, por lo que esta mañana volvió a arremeter en contra de jueces, ministros y magistrados, asegurando que no confía en el Poder Judicial.
“¿Tiene confianza en los ministros? —No, no. O sea, algunos, uno, dos, tres. La mayoría viene del antiguo régimen y no se atreven a llevar a cabo una reforma de fondo en el Poder Judicial. Aquí lo estamos viendo. Lo que predomina, lo que impera es que sólo se castiga al que no tiene con qué comprar la inocencia”, expresó, con marcada molestia por lo que considera un grupo privilegiado en el país.
Habló sobre los jueces que liberan a delincuentes, retomando cuatro casos hechos públicos en noviembre del año pasado, poniéndolos como ejemplo de la corrupción en el Poder Judicial, por lo que nuevamente propuso cambiarle el nombre a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
“Ya deberíamos de pensar si le seguimos llamando Suprema Corte de Justicia. Si acaso es Suprema Corte del Derecho, porque para la liberación de presuntos delincuentes se utiliza como excusa el derecho”, añadió, haciendo una mueca de molestia.
Y ante la propuesta de la nueva presidente de la Corte, Norma Lucía Piña, de reactivar el Sistema Anticorrupción, le respondió que debería empezar por el Consejo de la Judicatura.
NO HAY LÍMITE PARA LA INVERSIÓN EN JUSTICIA Y DERECHOS HUMANOS
Por otro lado, rechazó que no se esté atendiendo a las víctimas, y aseguró que se está invirtiendo y no hay límite cuando se trata de justicia y derechos humanos.
“Justicia y protección de Derechos Humanos no tiene límite en el presupuesto. Se está invirtiendo, pues yo les diría, miles de millones de pesos en justicia y en reparar daños. Por ejemplo, seguimos con el rescate de mineros, sólo esos dos proyectos implican una inversión de cuatro mil millones de pesos, los de Pasta de Conchos y ahora los de Sabinas, Coahuila”, aseguró.
Sin embargo, se molestó cuando un reportero de Veracruz, a quien él mismo había pedido que regresara, le pidió audiencia para tratar los casos de agresiones y asesinatos de compañeros de los medios de comunicación.
“Yo le pregunto, señor presidente, si desea recibirnos. Yo sé que tiene una agenda muy ocupada, pero creo que es necesario que conozca el sentir, lo que hemos pasado, lo que ha pasado doña Mercedes, porque asesinaron a su hijo, lo que han pasado todas las familias de quienes integramos esta red. Yo sé que a lo mejor no somos tan importantes para usted o no está aquí la mamá del Chapo, pero creo que nosotros sí, que es necesario que conozca nuestro sentir y venir a decirle que nuestros casos están en la impunidad. Ya sabemos lo que hay en las carpetas, no hay nada. O sea, no hay ningún avance”, explicó, al tiempo que preguntó qué es lo que están haciendo en estos casos las fiscalías, tanto las estatales como la federal.
La respuesta de López Obrador fue con la misma receta de siempre, “no somos iguales, somos diferentes, nos preocupamos por los derechos humanos”. “Y cuando dices de la mamá del Chapo, te lo digo con todo respeto, esos son los argumentos de nuestros adversarios, porque me bajé a saludarla tratan de igualarme”.
Finalmente, con el rostro compungido, aseguró que él siempre está recibiendo y atendiendo gente, “yo ando a ras de tierra, hablo con todos y no me presto a la manipulación”.
