Presenta CDHCM reporte de la alcaldía Tlalpan de la Consulta «¿Me escuchas? 2022

• Autoridades deberán considerar las opiniones para desarrollar acciones y programas encaminados a atender necesidades de NNyA.

Antes que el juego, a las niñas, niños y adolescentes (NNyA) de la Alcaldía Tlalpan lo que les hace más felices es la convivencia con su familia, destacó la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM), Nashieli Ramírez Hernández, de acuerdo con los resultados desagregados de la Consulta Nacional ¿Me Escuchas?

El porcentaje alcanzó 40% de quienes señalaron también que, entre los temas de mayor interés son el arte y la música, sobre todo entre las y los adolescentes, que formaron parte de las casi 7 mil participaciones, respondiendo a un cuestionario o expresándose en dibujos.

Durante la presentación del Reporte de la Alcaldía Tlalpan, la Defensora apuntó que los derechos humanos tienen que ver con el derecho de NNyA a ser felices, de ahí que las autoridades de esa demarcación, en conjunto con otras de manera transversal, deberán considerar las opiniones para desarrollar acciones y programas encaminados a atender sus necesidades.

Este ejercicio de participación, que congregó las expresiones de NNyA que hablan alguna lengua indígena y a quienes viven con alguna condición de discapacidad, así como a quienes no se identifican dentro de algún género no binario, arrojó que 60% de las y los adolescentes disfruta de la convivencia familiar, en un porcentaje diferenciado notable con respecto a sus pares en la Ciudad.

“Por ejemplo: los niños que no tienen discapacidad se sienten más felices al convivir con sus amigos, que los niños que viven con una condición de discapacidad. Ahí tendríamos que ver qué tanto estamos haciendo con los espacios de socialización”, subrayó.

En ese rubro, detalló que niños y niñas con discapacidad psicosocial, que enfrentan procesos de depresión o autismo, expresaron su interés en aprender cosas nuevas, entre lo que más les hace felices, lo que puede significar el desarrollo de su relación mental con el mundo.

“No quieren quedarse encerrados en su casa, protegidos, sino conocer otros espacios. Hay que ver la forma cómo los adecuamos para poder incluirlos”, advirtió Ramírez Hernández.

En cuanto a las NNyA que hablan alguna lengua indígena, dijo que, dado que pasan la mayor parte de su tiempo con sus familias, convivir con sus amigos y amigas es lo que los hace más feliz, además de que les preocupa la violencia y el maltrato en las calles y en el ámbito escolar, así como la contaminación ambiental.

Ramírez Hernández explicó que a las niñas y niños en primera infancia les preocupa muchísimo enfermarse, y a los que viven con alguna discapacidad les preocupa el trato desigual, pues ya perciben su condición como un factor de discriminación.

Al igual que al resto de NNyA de todo el país, a este sector de la población en Tlalpan le gusta mucho platicar con sus padres, sobre todo con su madre, pero en menor porcentaje con sus profesores. Quienes se identificaron con género no binario señalaron que les gusta más platicar con sus amigas y amigos.

En términos generales, 70% opinó que les gustaría ser escuchados por su familia, así como un interés y afecto generacional por los animales de compañía, especialmente los perros y los gatos, por lo que su pérdida les causa gran sufrimiento, que no debe ser minimizado por los adultos a su alrededor.

Entre sus mayores intereses está el arte y la música, en particular; relacionan a México con sus manifestaciones culturales y lo relacionan con la palabra “bonito”; en 45% de los dibujos pintaron personas y expresaron su gusto por la convivencia familiar y su relación con adultos, así como el juego y asistir a la escuela, así como la socialización con sus pares. En cambio, lo que les pone tristes es el maltrato, ya sea con gritos, golpes y “chanclazos”.

En tanto, la Alcaldesa de Tlalpan, Alfa Eliana González Magallanes, consideró fundamental la entrega del Reporte de la Consulta porque permitirá conocer lo que niñas, niños y adolescentes de la demarcación piensan, quieren y necesitan.

“Todas y todos, independientemente de nuestra edad, queremos ser escuchados. Eso es lo que hemos encontrado en Tlalpan; queremos que sepan nuestros problemas y emociones. Cerrar la escucha no beneficia a nadie”, destacó.

Explicó que después de la pandemia por COVID-19, aún se tienen emociones derivadas del encierro y ahí hay que trabajar en el tema para no desahogar esas emociones negativas a través del maltrato en contra niñas y niños.

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