«No estamos condenados a la violencia ni a las adiciones»: Rosa Icela Rodríguez

Agencia Libertad ANI (México, 19 de mayo).-La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y el Gobierno capitalino lanzaron el Programa de prevención de las violencias y las adicciones en escuelas secundarias de la Ciudad de México.

En una primera etapa, las acciones para frenar la violencia, así como evitar el consumo de drogas y de alcohol entre jóvenes, se aplicarán en 40 secundarias de Iztapalapa y Gustavo A. Madero.

Durante su participación, la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez,  pidió a los estudiantes de secundaria no caer en la tentación de probar las drogas y  “cuando les digan que no les va a causar adicción, no lo crean, al crimen no le interesa su salud ni su bienestar, al principio las regalan, luego los enganchan y los convierten en clientes y en un negocio más para ellos”.

Aseguró que muchos de ellos tienen futuros promisorios, por eso les dijo que deben ser cautos,  para no cruzar la línea y “tener las antenas bien prendidas y no traicionar nuestros valores, a nuestra familia y sobre todo, nuestros sueños”.

“Construyamos la paz, no estamos condenados a la violencia ni a las adicciones, estamos destinados a la paz y a concretar nuestros sueños: Soñemos”, refirió.

 Mientras que la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que construir la paz no es solamente atacar delincuentes, sino “es construir una Cultura de Paz desde las escuelas y desde el ambiente familiar”.

Pidió a los jóvenes denuncia cualquier tipo de violencia y no caer en las drogas, pero además aseguró que las personas que comenten algún delito no nacieron malas, lo que pasó, dijo, es que no tuvieron las condiciones sociales adecuadas.

“A veces, cuando hablamos de índices delictivos, que el Homicidio, que el Robo de vehículo, que el Robo a casa-habitación, parecen números fríos; pero hay quien comete esos delitos y esas personas, no es que hayan nacido siendo malas, las condiciones familiares, las condiciones sociales las fueron llevando a un proceso en donde acabaron delinquiendo, robando o vinculándose con bandas delictivas que acabaron, inclusive, siendo homicidas”, afirmó.

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