*Reformular para atender el reto de obesidad y enfermedades crónicas
Redacción
Agencia Libertad ANI (México 01 junio).- El incremento en los casos de obesidad y sobrepeso, los problemas de salud por las enfermedades crónicas y el gasto que generan, están obligando a consumidores y gobiernos a tomar acciones y a los fabricantes a innovar para responder a estas tendencias, de acuerdo con estudios consultados por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO).
En la industria de los alimentos se están observando cambios significativos a una velocidad nunca antes vista, en donde la transformación de las características y preferencias de la gente ha provocado que las empresas reaccionen y se adapten de diversas maneras, atendiendo, entre otros retos, el aumento de obesidad y enfermedades crónicas de donde se deriva, por una parte, la presión de los gobiernos por regular esta industria y, por otro lado, las preferencias de los consumidores que eligen comprar alimentos más nutritivos, naturales y menos procesados.
Un estudio realizado por la empresa estadounidense de información, datos y medición de mercado Nielsen indica que el 75 por ciento de la población de América Latina está dispuesta a modificar su dieta; 80 por ciento a seleccionar alimentos que les ayuden a prevenir problemas de salud, en tanto que el 62 por ciento podría pagar un precio mayor por productos que consideran más saludables.
La misma investigación muestra que los consumidores latinoamericanos están cada vez más preocupados por los problemas de salud y eligen alimentos locales, frescos y orgánicos, mientras que en México, el 56 por ciento busca productos bajos en azúcar; 54 por ciento bajos en grasa y 67 por ciento productos frescos.
Otro estudio también de la consultora Nielsen apunta que los consumidores de todas las edades están empeñados en llevar vidas más sanas y muchos de ellos lo hacen al elegir opciones de comida más saludable.
Ciertos atributos saludables como “bajo en sodio” o “bajo en azúcar” parecen ser más atractivos para consumidores mayores, los atributos como “orgánico”, “libre de gluten” y “alto en proteína” son los que cautivan a los participantes más jóvenes.
Ante este hecho, en el que la gente ya no está dispuesta a tomar una actitud pasiva frente a la compra de alimentos, donde la conveniencia solía ser el principal impulsor, muchas empresas han acelerado su proceso de innovación a fin de mantener la preferencia de los consumidores mediante la renovación de productos ya existentes, el desarrollo de nuevos productos y la exploración de nuevos mercados, como señala el Director de la carrera de Ingeniería en Industrias Alimentarias de la Universidad San Ignacio de Loyola en Lima, Perú, Luis Olivera Montenegro.
En México, Grupo Bimbo, ha señalado que mantiene objetivos como la responsabilidad con el medio ambiente y la necesidad de tener nuevos procesos y tecnologías que ayuden a una producción más limpia y libre de conservadores, de acuerdo a lo mencionado por Juan Felipe Piedrahíta, gerente de esa compañía.
Por su parte, ante esa necesidad de innovación –refiere Mexico’s Greatest Brands-, desde hace años, Grupo JUMEX tomó la decisión de diversificarse e incursionar en diferentes categorías como la de bebidas isotónicas, mientras que sus productos líderes en el mercado de las naranjadas usan tecnología que permite procesar la fruta y convertirla en jugo —dicen— sin que sea necesario añadir o eliminar ningún ingrediente.
Grupo LALA presentó recientemente un nuevo producto de sabor natural con probióticos LGG y BB12, adicionado con vitaminas C y D, en respuesta al estudio realizado por Innova Market en México, en el que se destaca que más del 50% de las personas buscaron alimentos y bebidas que contribuyan a mejorar su sistema inmune y sus defensas a partir de la llegada de la Covid-19.
En ese sentido, Coca-Cola ha informado que reformuló y optó por el uso de fuentes naturales y orgánicas en sus productos, llegando incluso —sostienen— a tener en la actualidad más del 66% de su portafolio con opciones bajas o sin azúcar y destacan que desde 2017 su principal bebida tuvo una reducción en un 30% de calorías, llegando a eliminar 280 mil toneladas de azúcar de sus productos en 2019.
También PepsiCo Alimentos México informó el año pasado, sobre una transformación estratégica que tiene como eje la sostenibilidad ambiental con prioridad en los garbanzos, las proteínas de origen vegetal y los cereales integrales, y señalaron que incrementarían la reducción de azúcares añadidos y sodio, como respuesta a objetivos basados en la ciencia, en todo su portafolio, al cocinar sus alimentos con aceites más saludables.