- El Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero” advirtió que el 60 por ciento de las 68 variantes lingüísticas están en peligro.
- No existe una política transversal que respete sus derechos humanos.
- Se atropellan sus decisiones a partir de sus usos y costumbres, acusan.
Agencia Libertad ANI (México, 22 de mayo).-El Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero” advirtió que 60 por ciento de las más 68 variantes lingüísticas que hay en el país podrían desaparecer si continúa el desinterés del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador por los pueblos y comunidades indígenas.
A través del abogado del colectivo José Antonio Lara Duque, el organismo explicó que hay 11 conjuntos de leguas, cuyas familias lingüísticas son álgica, yuto-nahua, cochimí-yumana, seri, oto-mangue, maya, totonaco-tepechua, tarasca, mixe-zoque, chontal de Oaxaca y Huave.
Sin embargo, Lara Duque acusó al Estado mexicano de ser insensible hacia la herencia cultural de los pueblos originarios al no existir una política transversal para que se respeten sus derechos humanos.
“Hay un desinterés del Estado mexicano por defender y afianzar la herencia cultural de nuestra nación; lo mismo pasa con las raíces lingüísticas, sus usos y costumbres de lo largo y ancho del país”, aseveró.
Acusó la falta de traductores certificados para auxiliar a una persona indígena.
Destacó que proyectos embaticos como el aeropuerto “Felipe Ángeles”, la refinería “Olmeca” de Dos Bocas; el Tren Maya o el gasoducto Integral Morelos hace que se violente los derechos humano de las comunidades, al no tomarlos en cuenta. “Obras emblemáticas que carecen del consentimiento riguroso de los integrantes de pueblos originarios, quienes deberían estar informados del alcance de los cambios que repercutirán en su espacio y territorio; así como su debida aprobación”, expresó.
Al referirse a Kenia Inés Hernández Montalván, el litigante dijo que se encuentra en la cárcel como presa política ya que se le acusa de delitos que no cometió.
En cuanto a un centenar de familias de la comunidad Triqui de Tierra Blanca, Oaxaca, que fueron obligados a abandonar sus tierras por un grupo subversivo con intenciones políticas al gobierno priista de la región, afirmó que han sido victimizados por las autoridades de la capital del país.
“No debemos tolerar estas graves omisiones -u acciones- que victimizan de nueva cuenta a las personas que representan nuestra raíz indígena; el llamado es para que el Estado mexicano sea consciente en la necesidad de formular una gobernanza transversal en materia de derechos humanos con perspectiva en cultura indígena”, indicó.
En México, recordó, hay más de 7.4 millones de personas de 3 años y más que hablan alguna lengua indígena; las más habladas son el náhuatl con un millón 725 mil hablantes, maya con más de 859 mil, el tzeltal con 556 mil, según datos oficiales.
Las entidades con mayor porcentaje de hablantes de lenguas indígenas, agregó Lara Duque, son Oaxaca, Chiapas, Yucatán, Guerrero y Quintana Roo.
